The Scientist
No cabe duda que como platicaba con un buen amigo, la música es como el perfume, te envía en milésimas de microsegundos a ese año, a ese día, a ese lugar tan doloroso o lleno de amor.
A mí a pesar de más de 10 años de distancia, me sigue llevando a una madrugada densa y fría, metido en mi coche, inmerso en dolores que ya no había sentido. dolores de pérdida, de traición, de engaños.
Cuando creemos superado el proceso, llega una canción y te parte el plan, te avisa que aún a pesar de los años el corazón no olvida, que nuestro cuerpo, nuestro corazón y nuestra mente muere un poco, tal vez pierde unos segundos, o unas horas de vida, irrecuperables.
Yo morí hace más de 10 años, en mi coche, inconsolable, escuchando una y otra vez The Scientist y recordando una y otra vez el aroma de lo perdido.
A mí a pesar de más de 10 años de distancia, me sigue llevando a una madrugada densa y fría, metido en mi coche, inmerso en dolores que ya no había sentido. dolores de pérdida, de traición, de engaños.
Cuando creemos superado el proceso, llega una canción y te parte el plan, te avisa que aún a pesar de los años el corazón no olvida, que nuestro cuerpo, nuestro corazón y nuestra mente muere un poco, tal vez pierde unos segundos, o unas horas de vida, irrecuperables.
Yo morí hace más de 10 años, en mi coche, inconsolable, escuchando una y otra vez The Scientist y recordando una y otra vez el aroma de lo perdido.
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